Ayer estaba escuchando una bachata de Maluma que lleva por título "Tengo un amor" y una de las frases de su letra me dio mucho que pensar: 

"Pídeme lo que quieras,
Que por ti yo viajo el mundo en un barquito de papel".


Y así, sin más, absorta en mis pensamientos y dejándome llevar por el ritmo latino, me decanté por un look navy para salir a la calle. 

Viviendo en un país frío como Luxemburgo, la primavera constituye la época perfecta para sacar a lucir todo tipo de blazers, abandonando ya los pesados abrigos de invierno.

No suelo ser mujer de complementos dorados, pero me permito hacer la excepción en este caso, en el que botones dorados relucientes sobre el oscuro azul marino son característica principal de este estilo.

El origen del estilo navy data del año 1837, momento en el que tuvo lugar la coronación de la reina Victoria de Inglaterra. Ese fue el inicio de la conocida como época victoriana, en la que el Imperio Británico vivió una gran expansión que supuso grandes cambios para el Reino Unido en ámbitos como el cultural, el industrial, el político y el militar.

Es en ese entonces también cuando se fundó la Armada Naval Británica (Royal Navy) y con ese motivo se confeccionó un uniforme que distinguía a los marineros oficiales de los pescadores. Se cree que fue el capitán del H.M.S Blazer quien, en la coronación, los uniformó con una chaqueta de sarga azul combinada con blanco y botones metálicos en color plata o dorados. Para 1857 la reina lo había designado para toda la flota. De aquí viene el término azul marino.


En lo que atañe a la camiseta de rayas, se sabe que los colores sólidos estaban reservados para los Oficiales de Marina, mientras que los marineros sin rangos elevados llevaban rayas azules y blancas, por si alguien caía al mar. Fue la gran Coco Chanel quien la incorporó a la moda y al vestuario femenino.


Es de esta manera como los atuendos marineros pronto pasaron a formar parte de la moda civil de principios del siglo XX, con una fuerza arrolladora, para extenderse después a lo largo de nuestra historia reciente. Y tanto es así que hoy ya no se concibe primavera o verano sin que alguna de las prendas que caracterizan este estilo forme parte de nuestro fondo de armario.

A continuación siguen unas imágenes en un rinconcito muy característico de la parte antigua de la Ciudad de Luxemburgo. Y en un alarde de mezclar tendencias, blazer oversize con sus botones dorados, camisa oversize y gorra de Zara; leggins y medias de rejilla de Calzedonia y complementos como el bolso de Di-Bye y zapatos de Zara.

¿Te embarcas conmigo en ese barquito de papel?

Un abrazo en la distancia…




































Blazer, Camisa y Gorra: Zara
Leggins y Medias: Calzedonia 
Bolso: Di-Bye
Zapatos: Zara
Bisutería: Bimba y Lola