Éstas son las fotos de mí antes de ti...; antes de tu carita de ángel que me hará recordar que, como esas miradas fijas, con ternura a raudales por proyectar y en una busca casi desesperada por mi Amor y protección, no hay nada que se le pueda asemejar en la vida.

Son las imágenes previas al sentimiento del calorcito de tu cuerpo en mis brazos, contra mi pecho; mientras no paro de analizar cada uno de tus rasgos, movimientos... cualquier ruidito o sollozo que emites... Es entonces cuando te acerco a mi pecho más aun si cabe y tu olor a leche y a bebé recién salido del vientre materno (mi vientre) se apodera de mí...

Y te vuelvo a mirar... Esta vez, tu carita, y tu cabecita, tus manitas, tus piececitos, tus bracitos tan delicados... Y no puedo dejar de exclamar: mi niño, tan lindo, tan chiquitito, tan indefenso... Y creo no haber visto cosa más linda...

Éstas son las imágenes antes de volver a experimentar el Amor de madre; un Amor que, aunque suene a tópico manido, de tan inmenso e indescriptible que es, me resulta imposible poder plasmar un ápice de lo que estoy viviendo.

Y todo se vuelve tan insignificante y banal a tu lado...

Gabriel, mi niño, mi Ángel, mi todo... Gracias por lo muchísimo que ya me das.

Mamá te quiere.











Vestido: Zara
Gorra: The Kooples