Cuando el fin de semana se presenta después de una larga semana de trabajo y ves por la ventana correr la lluvia, es inevitable que vengan a ti pensamientos de aquellos momentos vividos en tu islita no hace mucho, en pleno invierno. Porque mientras en el resto de Europa se sobrevivía a una tempestad de nieve, en las Islas Canarias el sol lucía como parecía no haberlo hecho nunca.


Dicen que las mejores puestas de sol se gozan en África. Y, aunque a muchos no se les pase por la cabeza, la realidad es que Canarias, geográficamente, pertenece a tan hermoso continente, como hermosas son las puestas de sol que también se disfrutan ahí. 

A continuación os dejo algunas fotografías de mi reciente viaje a las Afortunadas y que fueron tomadas con tan sólo un teléfono. En este caso, os muestro la Playa de Puerto de Naos, en La Palma; playa volcánica como ninguna y en la que pude contar con una intimidad única a esas horas del día… 

El resto, lo dejo para vuestra imaginación.

Un abrazo en la distancia…